La aplicación de la radiofrecuencia induce un aumento de la temperatura interna (calentamiento profundo de la piel) produciendo estimulación de la síntesis de nuevo colágeno y elastina, componentes esenciales del tejido cutáneo, por lo que se la utiliza para atenuar las arrugas y líneas de expresión, dar firmeza y definición al contorno facial logrando un aspecto más joven. 

Los resultados se hacen evidentes con el transcurso del tiempo, dado que la neocolagenogenesis (formación del nuevo colágeno) necesita entre tres y seis meses, para efectivizarse, si bien comienzan a apreciarse desde la primera sesión y transcurridos unos pocos días.-

La gran ventaja de tratar la flaccidez cutánea (origen de las arrugas) con radiofrecuencia es que se puede continuar con una vida social normal inmediatamente después del tratamiento, e incluso no está contraindicado tomar sol, siempre que sea con una protección adecuada.

 

Se utiliza también a nivel corporal para el tratamiento de celulitis con muy buenos resultados.

 

La celulitis es una alteración del panículo adiposo que se observa a partir de la menarca en más del 95% de la población femenina. Diferentes factores influyen y favorecen el desarrollo de un trastorno local en la dermis e hipodermis. Dicha alteración se traduce en un compromiso de la microcirculación cutánea con consecuencias posteriores como micro y micronódulos en la grasa superficial.

 

La aplicación de Radiofrecuencia Resistiva Tripolar mejora la circulación de la piel y tejido subcutáneo, modificando favorablemente el metabolismo local con la consiguiente disminución del aspecto de la piel de naranja y de la flaccidez, por otro lado la estimulación térmica controlada produce retracción de este tejido, modelando y produciendo al mismo tiempo una reducción del volumen del área tratada.